El Templo de la Voluntad de Dios y la Unidad Internacional

El bello Hogar del Amado El Morya situado en las
colinas, fuera de la ciudad de Darjeeling, es el Lugar de
Reunión de aquellos Individuos quienes se han dedicado
por sí mismos a la promoción del más alto tipo de gobierno
nacional y mundial y la Hermandad Internacional, basada
en la elevación de los “stándards” del individuo y la nación
hasta el Estado Divino. Su Actividad es la antítesis directa
de las doctrinas que promulgan la igualdad de
la conciencia y el estado personal de cada hombre ante el
status subnormal de las masas incultas.
Mientras vamos fuera de la ciudad de Darjeeling, los
caminos sinuosos lentamente conducen hacia arriba, hacia
dentro del pie de las colinas de las montañas eternas de un
mar infinito hacia el lejano horizonte. Al final del camino
principal entramos a lo que conduce a una graciosa línea de
árboles, reminiscencia de una campiña Inglesa espaciosa,
y de repente llegamos al exquisito Palacio Blanco que es
el Hogar de El Morya en la India.
Está construido al estilo oriental del Taj Mahal, y en
los extremos están los minaretes cilíndricos que se elevan
con la historia completa por encima del edificio principal.
A medida que nos paramos al pie de la larga fila de
escalones que conducen a las sólidas puertas doradas —sobre
cada una de las cuales está una Cresta de un gran M.R.
sostenida dentro de un cáliz— manos invisibles separan las
blancas cortinas de terciopelo alrededor de las torres de
los salones, y ellas parecen unirse con las piedras blancas
de la construcción misma. Desde los escalones del Palacio,
uno puede mirar la grandeza de las Montañas Himalayas,
elevándose penacho tras penacho en la distancia. Nuestro
guía hala las largas cadenas que cuelgan a los lados de
las grandes puertas, y un melodioso sonido de campanas,
repercute a través de la quietud de la campiña. Las puertas
se abren silenciosamente y se revela el esplendor del
magnífico salón de entrada!
La Cámara en la cual La Llama Cristal de la Voluntad
Divina para el gobierno y la Unidad Internacional se
mantiene, no está abierta a ningún ser no Ascendido, pero
la Gran Cámara de Concilio, donde los Jefes de Estado, y
demás líderes Mundiales se reúnen tiene asientos para más
de quinientos invitados, y dentro de este salón sentirán el
tremendo Poder de la Unidad presente. En este salón hay
un bello Altar delineado en diamante y zafiros, y la nave
circular detrás de éste, está compuesta por tres grandes
vitrales azules que con la Luz que brilla detrás de ellos en el
Altar, trae a la conciencia de aquellos reunidos allí, algo de
la Radiación y el Color del Rayo de la Unidad Internacional
y la Cooperación Divina Gubernamental.
El Amado Maestro El Morya entra a la Cámara, y a
medida que se para ante el Altar, la Llama Cristal dentro
del Cáliz, se eleva hacia arriba, algo así como la llama de
un fuego físico. Esta entonces se difunde en la forma de
una gran Flor de Loto, y a una señal dada por el Maestro,
la Asamblea entera (incluyendo a los Grandes Seres en la
atmósfera arriba) respiran en Ella, bendiciéndola y calificándola
con Su propia Conciencia. Luego la dirigen hacia
afuera en Su viaje desde una capital gubernamental hasta
otra, en cadena, a través de la superficie de la Tierra.
A todos, el Amado El Morya les envía Su Amor. A los
“pocos” en cada era quienes están deseosos de ser constantes
en el Servicio Espiritual. Su vida se las dedica. Podemos,
como El Morya, orar para que ustedes estén entre
esos “pocos” quienes servirán con El hasta que esta dulce
Tierra y todas Sus evoluciones que le acompañan, lleguen
a ser la plenitud de la Santa Estrella de la Liberación.
En conciencia, entren a menudo al Hogar y Retiro del
Bendito Morya (cuando quiera que sea que esté abierto para
ustedes). Siéntense cerca del fuego en Su salón. Absorban
la Radiación de Su Fe y deseo de promover la expresión del
Reino de Dios sobre la Tierra. Traigan de regreso dentro
de su propio mundo y conciencia, la Radiación recibida.
Recuerden, que pocos saben de Su Retiro. Pocos saben
de Su Servicio. Pocos son invitados dentro de Su Hogar
y Presencia! Ustedes están entre esos pocos! Recuerden
también que lo que hagan con la oportunidad que se les
da, determinará las bendiciones aún por venir!