Cada uno de los hijos de Dios que reconozca y acepte a la Presencia del Único Poderoso Dios anclado dentro de su corazón y cerebro y sienta esa Verdad, profundamente, muchas veces en el día, realizando y conociendo que Dios llena su mente y cuerpo tan completamente de Luz, ya no tendrá sitio para nada más y entonces será libre. La Única Todopoderosa Presencia es la Magna Actividad Armoniosa de la Vida de cada uno de sus asuntos, y si su atención se ancla firmemente y con determinación sobre esta Verdad, no habrá altura de logros, por grandes que parezcan, que él no pueda alcanzar.
No hay sino Una Fuente y Principio de Vida, a la cual nosotros debemos dar nuestra atención completa, sin dividirla, y ésa es el Yo Divino Interno de cada individuo a ese Gran Armonioso Yo; el «Yo Personal» debería darle reconocimiento consciente en todo momento y mantenerse en constante Comunión con Él, no importa lo que la actividad exterior de la mente haga y manifieste.
Este Gran y Único Yo es la Energía-Vida fluyendo a través de cada cuerpo humano en todo momento, por medio de la cual todos están capacitados para moverse y funcionar en el mundo de la forma. Es la Sabiduría fluyendo a través de la mente, la Voluntad dirigiendo todas las actividades constructivas; el Coraje y Fortaleza sosteniendo a cada uno; el Sentimiento de Amor Divino con el cual todas las fuerzas pueden ser calificadas a medida que fluyen por medio del individuo. El Único Poder que puede siempre lograr cualquier cosa buena. Es el Dominio Consciente Todo Victorioso sobre toda condición de la actividad humana, cuando se descarga a través del Yo personal sin resistencia o interrupción.
Este Magno Yo Divino Interno de cada uno es el Supremo Gobernador de toda creación y es la Única y Eterna Fuente segura y permanente de ayuda en la existencia. Únicamente por medio de su Amor, Sabiduría y Poder puede cualquiera levantarse siempre hacia la Maestría Ascendida, por constante comunión consciente con Ella, quien es Libertad y Dominio sobre toda la creación humana. Cuando yo digo «creación humana», me refiero a todo lo que es discordante y menor que la Perfección.