CELEBRACIÓN DEL DÍA DE LA MADRE EN ARGENTINA

Esta energía Luz, esta energía Paz, la vamos a dirigir y sostener para este domingo, que se celebra en Argentina el día de la Madre, Honrando y Agradeciendo a cada madre que dio, permitió, que su vehículo físico nos contuviera y nos trajera a esta encarnación. Amando y Bendiciendo a cada ser, llamado Madre en esta encarnación, aunque no haya sido la Madre que esperábamos, aunque creamos en las deudas pendientes, aunque no haya sido lo perfecta que hubiéramos esperado. Cada Madre encarnada o desencarnada, por el solo hecho de ofrecer su vehículo físico para traer un ser, encarnado a este Planeta, merece nuestro Amor, nuestra Honra y nuestra Gratitud, no importa el contrato que luego haya tenido con nosotros. Honremos en Amor y Gratitud, desde hoy, porque las conciencias, al menos en Argentina, van a estar enfocadas en el día de la Madre, para honrar a ese ser, que permitió que encarnáramos, que estuviéramos hoy acá, ese ser, que lo reconocemos en la Madre tierra, que nos cobija a todos aunque no comprendamos lo que suceda, lo mismo sucede con nuestra Madre, a la Madre Cósmica, Madre María, llamada Madre Cósmica, Madre de la humanidad, a Madre Kwan Yin encarnada como un Amor Misericordioso, a esa energía de la Madre que cada uno lleva en el corazón, sea varón ó mujer, no importa, es una energía, a esa Madre, personificada aquí como Madre Kwan Yin, Madre Cósmica, Madre de toda la humanidad, Honramos y Bendecimos desde la Presencia, y a todas las Madres, que han hecho posible, que estemos hoy aquí, no importa nuestro vínculo con ella, y siempre nuestro vínculo, va ha ser estar en deuda porque ese ser permitió nuestra encarnación aquí hoy, y eso Amados seres, por más sabia que haya sido una Madre, o que nos haya parecido a nosotras lo que fue, no tenemos con que pagarlo, porque gracias a ese ser encarnamos aquí. Entonces desde hoy, empecemos a borrar, a transmutar, si hay un record, una memoria, un desagrado, un malestar energético con esa Madre encarnada o desencarnada, diciéndole, “TE AMO Y TE BENDIGO, Y TE DOY GRACIAS POR PERMITIRME ENCARNAR EN ESTE PLANETA”, y que así sea.