¡Que la Luz del Cielo se haga sentir a través de la energía de tu mundo y se convierta en el control Maestro de esa energía, hasta que el poder dirigido y enfocado desde dentro hacia fuera llegue a ser la inteligencia gobernante de toda actividad dondequiera que la vida, en su gloriosa expectativa, elija exteriorizar a Dios a través de tu ser! Algunos individuos, que tan cuidadosamente se han subido a la Roca de la Verdad, esperaban que en cualquier momento ésta se disolvería en polvo pulverizado, y les dejaría en la manifiesta indignidad de quedar hasta las rodillas en las aguas de maya –el hazmerreír de sus prójimos más conservadores y suspicaces.¡Ah, el sufrimiento del ego cuando se ríen de él! Seres humanos menores, buscando el visto bueno de la aprobación popular, nunca se hundirán en las mareas más allá de las aguas poco profundas del culto ortodoxo, manteniéndose alejados con fuertes brazadas de una orilla más lejana, ¡por si acaso la meta hacia la que nadan es un espejismo, y tienen que ser vergonzosamente llevados de vuelta a la orilla por un guardacostas que sonreiría malignamente!Aquí y allí, donde podemos captar la atención de un chela –y ondeando la bandera de la liberación –sostener su atención el tiempo suficiente para hacerle “dar el paso”, tenemos éxito, no sin esfuerzo,sin embargo, en asegurar otra consciencia a través de la cual podamos Nosotros, a su tiempo, ¡establecer un puente sobre las aguas de maya y hacer un “pasaje” más fácil para las tímidas masas !Tú, que te mueves dentro de la fuerte corriente del Río Místico, Nos encontrarás siempre a tu lado. Un día encontrarás que el lecho del río se eleva para encontrarse con tus pies de buscador, y caminarás con seguridad lo que queda del camino hasta esta orilla más lejana… regresando, cuando la ocasión lo requiera y el Amor lo desee, para llevar a otras almas a una liberación parecida, en el Nombre de Dios y de los Hijos Santos del Cielo.
Amado Morya