DECRETOS DE LA PAZ Y LA OPULENCIA.

N°1. Con pleno Poder y Autoridad de la Amada Presencia de Dios «Yo Soy», invocando los Rayos portadores de Paz y Opulencia Divina, para que desciendan desde el Templo de la Hermandad en Suva; el Amado Surya y a todos los hermanos y Hermanas de la Paz y sus Legiones de Ángeles para que irradien estos poderosos Rayos hacia este Planeta.

Traspasad Vuestros Rayos Cósmicos de la Paz a través de toda la humanidad hoy, permitid que ellos rediman a cada ser humano, limpiándolos de toda discordia aquí y ahora. (X3)

Nosotros aceptamos este llamado realizado como el más Sagrado Nombre de Dios «Yo Soy».

 

N°2. Con todo el Poder y la Autoridad de la Amada Presencia «Yo Soy», apelamos por el Amado Surya y su Hermandad y por las Legiones Angélicas de la Paz.

Purifiquen la humanidad y transpásenla con los Rayos Cósmicos de la Paz. (X3)

Rediman todo ímpetu de discordia interna o externa mediante el Misericordioso Rayo de la Paz. (X3)

Nosotros aceptamos este llamado autosostenido y siempre expansivo en el Sagrado Nombre de Dios «Yo Soy».

 

N°3. En el Nombre y Autoridad de la Amada Presencia «Yo Soy», invocamos a los Poderosos Rayos Cósmicos de Paz y de Abundancia.

En nombre del Logos de la Paz Surya, nosotros Os invocamos:

Oh!! Luz inteligente, descended en todos los lugares del planeta Tierra, donde cualquier persona invoque y acepte la Paz y la Abundancia para uso constructivo, id a todas partes, relampaguead Vuestro Fuego Sagrado, quebrando los conceptos humanos construídos a través de las edades. Limpiad de esos conceptos el cuerpo etérico, sanad y dejad libres los cuerpos mental y emocional, para que podamos exteriorizar una Conciencia Luminosa de Paz y de Abundancia.

Invitamos e invocamos las Sagradas  Presencias de los Grandes Seres sirviendo en el Templo de Suva, para que intensifiquen su Radiación de Quietud y Tranquilidad Divina, hacia los vehículos de los seres de la Tierra y se exprese en el Planeta, sus Naciones, Gobiernos y Elementos, la Paz y la Opulencia llegando como una Bendición de Amor Divino.

Emanad los Rayos de Vuestro Retiro proyectándonos la Voluntad de hacer el Bien, el  Conocimiento y el Discernimiento Perfecto que exterioriza eso, y el Amor que vivifica, hasta que una manifestación perfecta ocurra plena de Paz, y esa Paz sea sustentada.

Haced que cada hijo de Dios acepte esta fórmula perfecta de la Ley de Precipitación, transformándose en un Río de Luz que recorra y recubra la Tierra.

Aceptamos ahora que el Rayo dela Paz y la Abundancia envuelva nuestros hogares y familias, nuestra Célula Avatar, nuestra Nación Argentina y se expanda al Continente Americano y al Planeta entero, exteriorizando toda la Provisión cuya Esencia fluye constantemente de Dios y es nuestra Herencia Divina. Aceptamos este llamado realizado, poderosamente activo y autosostenido en el más Sagrado Nombre de Dios «Yo Soy».

 

N°4. Como «Yo Soy» ese «Yo Soy»ahora retornando a la Tierra, me reconozco Uno con el Fuego Solar  de Dios Padre-Madre, «Yo Soy» Presente en su ilimitada Esfera de Prosperidad, Paz y Suministro sin fin, de todos los bienes y cosas Perfectas requeridas para cumplir mi Plan Divino y mantener la Tranquilidad, Felicidad, Alegría y Paz en mi vida.

Me levanto ante el Trono de Dios, expandiendo mi Presencia Solar a medida que afirmo:

«Yo Soy» expandiendo Mi Llama para la Prosperidad y Paz Solar.

 

«Yo Soy» expandiendo la Llama de mi Familia para la Prosperidad y la Paz Solar.

«Yo Soy» expandiendo la Llama de mi Ciudad para la Prosperidad y Paz Solar.

«Yo Soy» expandiendo la Llama del Grupo del Amor de San Justo para la Prosperidad  y Paz Solar de todo lo que la forma y la conforma.

«Yo Soy» expandiendo la Llama de esta Nación Argentina, su Gobierno y sus gobernantes, para la Prosperidad y Paz Solar. «Yo Soy» expandiendo la Llama de la Tierra y todas sus evoluciones, para la Prosperidad y Paz Solar.

Esta Llama fluye a través de mi y «Yo Soy» su Manifestación.

Así Sea, Amado «Yo Soy».

 

N°5. «Yo Soy» absorbiendo la Paz y Opulencia del Amado Surya y «Yo Soy» demandándola, especialmente para todos los chelas alcanzando su Ascensión. (X3)

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