Por consiguiente, si deseáis dar Justicia Divina a la Vida, hay que comenzar por tratar esta parte de la Vida en vosotros, que contiene más energía. Evidentemente, YO no puedo deciros que vuestros sentimientos posean más Energía que las Llamas de vuestros Corazones-hablo de vuestros cuerpos sutiles que tenéis que purificar-, porque todos vuestros deseos y toda vuestra vitalidad pasan por el cuerpo emocional y el cuerpo etérico antes de aflorar en vuestra carne.
Amada Diosa de la Justicia