La Felicidad es el gran regalo que todo individuo está buscando.
La Felicidad permanente no se logra jamás, EXCEPTO a través de la adoración a Dios, la Magna Presencia YO SOY, la cual está dentro, encima y alrededor del individuo. La Felicidad es una alquimia poderosa. Es uno de los purificadores más poderosos del pensamiento, sentimiento, mente, cuerpo, aura y mundo del individuo. Si el estudiante tan solo creyera y experimentara esto consigo mismo, se daría cuenta de que él puede generar la felicidad a voluntad. Cuando el estudiante sienta que algo lo perturba y quiera volverse hacia Dios, debe hacer lo siguiente para ayudarse: levántense y hagan de cuenta que se sacan la ropa que no les gusta, y cuando la tengan en la mano, la arrojan dentro de la Llama Consumidora. Sepan que el elemento que los está molestando es así consumido. Luego fijen su atención en Dios, la Poderosa Presencia YO SOY, con la conciencia alegre de sentir y recibir la corriente de felicidad y paz llenando la mente y el cuerpo. Con una pequeña práctica, el estudiante pronto será capaz de llegar al punto en que pueda atraer su gran felicidad concientemente y a voluntad.